El hecho que un juez deba aplicar una pena a un ciudadano que ha inflingido la ley es un síntoma que quizás el Estado haya fallado en otras instancias: educación, desarrollo económico, prevención del delito, ausencia en la planificación de la ciudad.

Lamentablemente en Esquel el problema de la inseguridad ha ingresado en la agenda de problemas importantes de la ciudad.

Contamos en Esquel con una buena cobertura en materia de prevención: la policía provincial, policía federal, gendarmería nacional, algo de vigilancia con cámaras, pero no tenemos con una Alcaldía en condiciones de albergar todos los detenidos que debería haber.

En el año 2000 se estaba por comenzar la obra de la Nueva Alcaldía de Esquel, con un proyecto modelo, pero la gestión justicialista que recién comenzaba ordenó la suspensión de la misma argumentando que iba a sacar la Unidad 14 del lugar donde está y que incluiría la alcaldía en el traslado. Ni siquiera se hizo el proyecto, menos la obra. Por eso hoy existe la «excusa» en el poder judicial que hay que liberar a sospechosos porque no hay donde mantenerlos detenidos.

Los asentamientos espontáneos de población, generan en muchos casos pasajes estrechos donde no puede circular un patrullero policial. Esto posibilita que con el tiempo aparezca el crimen organizado, que encuentra en estos lugares un lugar propicio para sus tareas y arman un Estado Paralelo dentro del barrio. Este proceso de «favelización» es uno de los comienzos del problema de la inseguridad, primero en el mismo barrio y luego en toda la ciudad.

Estas situaciones, todavía incipientes y aisladas, se están dando en algunos puntos de Esquel. Los abordaremos en forma urgente, urbanizando, generando tierras planificadas con vías de circulación que cuenten dentro de su equipamiento urbano con edificios para las fuerzas de seguridad.

Asentamiento de vivienda sin planificar.
Ejemplo extremo de un asentamiento de viviendas sin planificar.

En materia de seguridad, abordaremos la problemática basándonos en estos ejes:

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